Coriza infecciosa en pollos y gallinas

Moquillo o coriza infecciosa en pollos y gallinas

La Coriza Infecciosa Aviar o Coriza Aviar es una enfermedad de tipo respiratoria de las aves, el signo clínico más notorio es un edema facial severo, en gallinas ponedoras va de la mano  con un una disminución considerable en la producción de huevos.

Es una enfermedad aguda infecciosa  del sistema respiratorio, la cual es causada por una bacteria inmóvil Gram negativa conocida como Avibacterium paragallinarum, la cuál se conocía en el pasado con el nombre de Haemophylus paragallinarum. Está bacteria se caracteriza por no ser muy resistente y se puede destruir al tener contacto directo con el sol, por medio de deshidratación  e incluso utilizando desinfectantes comunes.

Existen 3 serotipos de Avibacterium paragallinarum y se conocen como A, B y C. A la hora de hacer inmunización de las aves contra la enfermedad, esta clasificación es de suma  importancia. Es una enfermedad no zoonótica (no se transmite de aves a humanos ni de humanos a aves; por lo que si se consumiera ya sea la carne o los huevos de animales enfermos de Coriza no existirá ningún riesgo en la salud humana.

Signos Clínicos de la Coriza Infecciosa Aviar.

El síntoma clínico más destacado es el edema facial severo que no es más que la inflamación de la cara del ave, acompañado de una conjuntivitis con descargas óculo – nasales. También puede inflamar cresta y barbillas, una de los senos infraorbitales con exudado. Se puede apreciar una tos y estornudos, que son los responsables de favorecer la propagación de la bacteria.

También se puede observar plumaje erizado, fiebre, destilación de un flujo claro por la nariz muy mucoso que finalmente puede ser purulento por una o ambas aberturas nasales y  formación de unas costras que se generan debido a que el polvo se  adhiere  en las fosas nasales.

Como en cualquier  otra enfermedad, se observará una disminución rápida en el consumo de alimento y las gallinas ponedoras tendrán una reducción en la postura entre un 10 – 40% aproximadamente. La morbilidad  es alta por lo que es muy común en la mayoría de las aves de un lote  observar signos clínicos, pero la mortalidad  por lo general es  baja, pero puede ser muy alta si se generan complicaciones provocadas por agentes patógenos como la E. coli y Mycoplasma gallisepticum.

Prevalencia de la Coriza infecciosa Aviar.

Se debe tener claro que la enfermedad puede afectar tanto a pollos de engorde como a las gallinas ponedoras de cualquier edad, pero es más común observar la enfermedad  en aves que están maduras. Por lo general una gallina ponedora se puede contagiar al poco tiempo de haber sido trasladada a las casetas de producción y en el pico de producción.

El periodo de incubación es muy corto, alrededor de  24 – 48 horas  posteriores a inoculación experimental y en condiciones normales alrededor de unas 72 horas. Ahora bien si no se presenta ningún tipo de complicaciones, la enfermedad solo durará alrededor de unos 15 días.

Transmisión de la Coriza infecciosa Aviar.

La Coriza se puede transmitir a través de la vía respiratoria o digestiva, por inhalar aerosoles, por consumir  agua y alimento contaminado. Además la maquinaria y equipos pueden transportar la bacteria entre las de una granja a otra.

Hay que tener claro que las aves que se recuperan de la enfermedad serán portadoras asintomáticas es decir tendrán la bacteria en su organismo y no presentarán ningún tipo de síntoma; por lo que es muy difícil en las granjas que no practican el sistema “todo dentro todo fuera”, poder eliminar la enfermedad de sus granjas.

Diagnóstico de la Coriza infecciosa Aviar.

Se debe realizar un aislamiento de la bacteria utilizando un cultivo cruzado con Staphylococcus en agar sangre, por un tiempo de 12 horas a una temperatura 37 ° C bajo condiciones anaeróbicas. Para este método también  se puede implementar la  inhibición de la hemaglutinación y la técnica PCR.

La coriza infecciosa aviar no se debe confundir con enfermedades como la Viruela aviar, Ornito Bacteriosis o el Síndrome de cabeza hinchada, Diftero viruela, Carencia de vitamina A. E.R.C., Laringotraqueitis, Bronquitis Infecciosa, Newcastle y Cólera.

Tratamiento de la Coriza infecciosa Aviar.

La bacteria A. paragallinarum es susceptible a diferentes antibióticos que se pueden suministrar en el agua  y alimento, el antibiótico más utilizado para el  de la Coriza son las tetraciclinas. También se pueden utilizar otros antibióticos como Estreptomicina, Cloranfenicol, Sulfametazina y Sulfatiazol. La aplicación de bacterina se realiza cuando las aves tengan una edad de 70 días y se puede repetir 4 semanas después, utilizando ½ centímetro cúbico por ave, vía subcutánea.

Ejemplo:

• Con Eritromicina:  Diluir 25 gramos de polvo, por cada 10 litros de agua del bebedero, durante 5 días.
• Con Oxitetraciclina: Diluir 5 gramos de polvo, por cada 2 litros de agua del bebedero, durante 5 días.

Control de la Coriza infecciosa Aviar.

Si en una zona determinada la enfermedad no es endémica, se puede realizar una despoblación con el fin de poder reducir la transmisión a nuevas producciones. Y por el contrario, se debe evitar introducir aves de reemplazo en casetas donde Se tengan animales enfermas o que estén recuperadas de la enfermedad.

Se deberá limpiar y desinfectar todas las casetas y equipos en su totalidad luego de haber sacado todas las aves y se debe esperar mínimo 3 semanas antes de introducir nuevas aves. El uso de medidas de bioseguridad estrictas es recomendado.

Utilizar vacunas inactivas como bacterinas comerciales se recomienda más en regiones que presenten una alta incidencia de esta enfermedad; La vacuna deberá contener el mismo serotipo de la bacteria A. paragallinarum que sea prevalente en la zona. Las aves antes de iniciar la postura o ser trasladadas a otra granja se deberán vacunar con 2 dosis.

Video coriza aviar

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