Papilomatosis Bovina.

Papilomatosis Bovina

Publicado por

Papilomatosis Bovina

Papilomatosis Bovina Por: Fabian Martinez Viloria; Zootecnista

La Papilomatosis Bovina o Papilomatosis cutánea bovina  es una enfermedad infectocontagiosa, de origen viral, crónica, de carácter tumoral benigno y de naturaleza fibroepitelial, la cual se caracteriza por generar tumores en las mucosas y la piel del animal.

Se ha reportado la asociación de un tipo de verruga en la Hematuria Vesical Enzoótica Bovina (“orina con sangre”), enfermedad no infecciosa producida por el consumo del Helecho común conocido como “Shapumba” (Pteridium aquilinum) (Wosiacki SR et al 2008).

En la literatura se mencionan a seis tipos de Papillomavirus Bovinos los cuales están debidamente identificados de la siguiente manera PVB Tipo I, PVB Tipo II, PVB Tipo III, PVB Tipo IV, PVB Tipo V y PVB Tipo VI. De los cuales  los PVB Tipo II y los PVB Tipo III son los más comunes.

Algunos pocos animales se puede presentar una autocura, pero esto no sucede en la mayoría de ellos, por lo que se hace necesario realizar tratamientos generalmente. El problema más serio que genera esta enfermedad, son las verrugas o papilomas que afectan a la ubre del bovino infectado, y cuando se presentan a estos niveles no responden a los tratamientos conocidos generalmente.

 papilomatosis bovina tratamiento

Origen y Transmisión de la Papilomatosis Bovina.

El agente etiológico que ocasiona la enfermedad son los Papilomavirus, que se excretan en células descamadas de la piel de animales que están infectados y que se puede transmitir por contacto directo entre animales o por medio objetos contaminados como instrumental veterinario, sogas, agujas, , manos del ordeñador y  por la acción de garrapatas, moscas, tábanos, etc. El virus entra por las pequeñas lesiones que se puedan generar en la piel de los animales sanos. Hay evidencias recientes que indican  que el virus podría  transmitirse a través del semen, óvulos fertilizados in vitro, de la madre al feto y por medio de los embriones.

Signos clínicos de la Papilomatosis Bovina.

Las verrugas inician a observarse entre 1 – 3 meses posteriores a la exposición al virus. Dichas verrugas se caracterizan por aparecer en los animales jóvenes y rara vez se desarrollan en aquellos tienen una edad que supera que tienen más de dos años.

papilomatosis bovina

Patología y Diagnóstico de la Papilomatosis Bovina.

Las verrugas cutáneas cuando aparecen tiene forma de una especie de masa similar  a un coliflor que se elevan sobre  la superficie de la piel y están cubiertas por escamas o costras con formas y  tamaños variables. Las verrugas por lo general y con mayor frecuencia aparecen en partes del cuerpo como la boca, el mentón, el cuello, hombros y las ubres, pero se pueden observar en numerosos lugares del cuerpo.

El diagnóstico de esta enfermedad es mediante la observación clínica o de la piel. Para lograr un diagnóstico confiable en las verrugas de pene (fibropapilomas), el pene debe estar completamente extendido para su análisis, aquí el animal debe estar sedado para poder realizar este diagnóstico.

Razas más susceptibles a la Papilomatosis Bovina.

Aquí podemos destacar razas bovinas tales como:

Simmental.

Holstein.

Brown Swiss.

Jersey.

Girolandos.

y otros cruces.

Tratamiento y Control de la Papilomatosis Bovina.

La Papilomatosis bovina presenta dificultades en el control debido a los diferentes tipos de virus que afectan a los bovinos, los cuales se han tipificado en seis variantes a saber:

  • Los Tipo 1 y 2 que afecta la cabeza, el cuello, el pene y la mucosa vaginal.
  • El Tipo 3 que afecta la piel.
  • El Tipo 4 afecta el tracto alimenticias y se ha asociado al consumo de helecho.
  • Tipo 5 en forma de grano de arroz en los pezones.
  • Tipo 6 formas aplanadas en los pezones. 

Por otra parte los animales afectados presentan dificultad en la comercialización debido al aspecto desagradable y el deterioro de las pieles para ser utilizado en la industria de  (Carter et al 2005).

Una de las características más importante de esta enfermedad es que, en la mayoría de los casos, las Verrugas se mueren solas pasado varios meses.

papilomatosis_bovina
papilomatosis bovina.

Para combatir las verrugas se han ideado numerosos tratamientos, pero deben saber que las verrugas morirán solas sin ningún tipo de tratamiento. aun así un tratamiento  recomendado y que ayuda a su desaparición es aplastarlas varias de ellas utilizando unos alicates, lo cual libera el virus en la circulación sistémica del animal, en un rápido desarrollo de la inmunidad.

Las verrugas pueden generar otros problemas como por ejemplo las verrugas cerca a los ojos traer como consecuencia el desgaste de la córnea del ojo del animal. 

En algunos países las vacunas contra las verrugas ya están disponibles.

  • Vacunar terneros jóvenes podría ayudar a prevenir que las verrugas se desarrolle.
  • En los toros las verrugas del pene pueden ser un grave problema (especialmente los reproductores).
  • Es muy recomendable  vacunar a los terneros y luego realizar una revacunación antes de ser puesto en servicio de monta.

El uso del cobre en la forma de Etilendinitrilo tetracetato de calcio y cobre a razón de 200 mg en un grupo de animales con papilomatosis de varios tipo resultó más efectivo como tratamiento que el cobre orgánico en dosis de 287,4 mg, constituido como Lactobionato de cobre vía parenteral (FRANCO DA SILVA et al 2007).

Recomendaciones para el control de las Verrugas ocasionadas por la Papilomatosis Bovina.

  • Lo más recomendable es tener “hatos cerrados” en pocas palabras, no se deberá comprar animales de otras producciones, ya que porque podrían estar infectados.
  • Si existe un animal infectado se tiene que identificar, aislar y por último iniciar el tratamiento para combatir los papilomas.
  • No es muy recomendable utilizar para la reproducción reproductores que tengan en su historial aparición de verrugas y se encuentren “aparentemente sanos y libres” de verrugas.
  • Como existen reportes que aseveran la posibilidad de la transmisión de verrugas vía Inseminación Artificial, transferencia de Embriones y Fertilización In Vitro, (Carvalho et al 2003, Freitas et al 2003), se recomienda pedir información sanitaria sobre esta patología a las centrales de I.A. y T.E o proveedores de este material Genético.
  • En este mismo sentido, como ya se mencionó se debe pensar dos veces antes de introducir animales de otros establos al hato, tomando en cuenta el riesgo de la transmisión vertical madre – cría (Stocco dos Santos R.C., et al. 1998).
  • Se debe realizar un adecuado programa sanitario, siendo muy estrictos en la suplementación mineral.
  • Realizar un buen control de garrapatas y moscas en el hato ganadero.
  • Se debe desinfectar continuamente todo equipo veterinario que se utilizará en los animales, utilizando una solución de formol al 2 %.

    Otras enfermedades bovinas.

Referencias Bibliográficas.

  • CARTER, GR, WISE, DJ y FLORES, EF Una revisión concisa de virología veterinaria [en línea]. Disponible: www.ivis.org [citado 8 Febrero 2005].
  • Carvalho et al (2003) Bovine papillomavirus type 2 in reproductive tract and gametes of slaughtered bovine females. Brazilian Journal of Microbiology (2003) 34 (Suppl.1):82-84.
  • FRANCO DA SILVA, LA, RODRIGUES DE SOUSA, V., MACHADO, MA, GUIMARAES, L., SOARES, MC, RABELO, RE, DE MOURA, MI, SOARES, LK y DA CUHNA, PHJ Efecto del etilenodinitrilo tetraceto de calcio y cobre y del lactobionato de cobre parenteral en el tratamiento de la papilomatosis cutánea bovina. Revista Técnica Pecuaria en México, 45 (3), 2007, p. 289-297.
  • Freitas et al (2003) Viral DNA sequences in peripheral blood and vertical transmission of the virus: a discussion about BPV-1. Brazilian Journal of Microbiology (2003) 34 (Suppl.1):76-78.
  • Stocco dos Santos R.C., et al (1998): Bovine papillomavirus transmission and chromosomal aberrations: an experimental Model. The Journal of General Virology 79: 2127 – 2137.
  • Wosiacki S R et al 2008. Bovine papillomavirus type 2 detection in the urinary bladder of cattle with chronic enzootic Haematuria Memoria do Instituto Oswaldo Cruz v 101, n6 p 665 – 638.

2 comentarios

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.